Elegia rota a Rafael Pillado, amigo, mestre, compañeiro e camarada Yo no me río de la muerte. Sin embargo conozco su blanca casa, conozco su blanca vestimenta, conozco su humedad y su silencio. Claro está, la muerte no me ha visitado todavía, y uds. preguntarán: ¿qué conoces? No conozco nada. JAVIER HERAUD “Jamás os dire ADIOS, a vuestra cita no faltare” Es impagable este día eterno sin cielos troquelados de una “fe adorable que el destino blasfema” sin un solo dios verdadero y sin las jaculatorias del miedo y la amargura Una bandada roja de manos clandestinas acompaña esta firme tristeza sin embargo también ondean manteles blancos de abrazos comestible Hoy un sueño que no duerme se posa con toda la fatiga del mundo en los ojos desorbitados de escuchar como cedes la vida su sonido de semilla con el peso justo la indomable sabiduría por ejemplo, de amar de pie sin concesiones Hoy la ciudad tiene los pies fríos y toda ella es una roja periferia donde nadie
BLOG DE OPINIÓN DA ASOCIACIÓN CULTURAL FUCO BUXÁN
Vaya, vaya…como son los abrazos hechos de simpatía y solidaridad. Solo voy a decir que primero son las gracias por loa tan inmerecida, pero con tal literaria belleza que la humildad bien casa.
ResponderEliminarTambién cabe la aceptación de toda la alabanza por lo que tiene de apoyo, ayuda mutua, apoyo contra la mas descalabrada de las mediocridades en que nos ha sumido el Poder, mezquindad sin vergüenza alguna (Y cómo no, si la vergüenza es revolucionaria), apoyo de la Poesía con mayúsculas, con minúsculas, sin manos …en la cual la palabra se restaura de tanta agresión y mentira, de tanta criminal manipulación, y de nuevo la palabra como el primer día, nombrando el mundo, tallando los sueños, vacunandonos contra la miserable abundancia.
Gracias Don José, gracias. Por la amistad que la inteligencia del corazón cría.
Así no hay dios, incrédulo como son los dioses, ni humano, por muy imbécil que se muestra, que impida la cita con la inconsumible poesía.